Las reservas internacionales del Banco de México (Banxico) marcaron un nuevo máximo histórico al cierre de la semana del 19 al 23 de mayo, al alcanzar un saldo de 239 mil 885 millones de dólares, superando así el récord anterior registrado apenas una semana antes.
Este aumento responde, en gran parte, a tres factores principales: la revaluación de activos financieros, la venta de dólares por parte de Pemex y las operaciones del Fondo Mexicano del Petróleo, de acuerdo con el estado de cuenta semanal de Banxico.
En lo que va del año, las reservas han tenido incrementos en 19 de las 21 semanas, con una acumulación total de 10 mil 895 millones de dólares. Solo el cambio en la valuación de activos explica el 26% de este crecimiento, gracias al rendimiento positivo de las inversiones del banco central, incluidas aquellas en oro.
Adicionalmente, Pemex contribuyó con 2 mil 900 millones de dólares, al vender divisas directamente al banco central en seis semanas, lo que representa un 26.6% del crecimiento total. Otro 5.8% provino del Fondo Mexicano del Petróleo, que también realizó ventas de dólares a Banxico.
Fortaleza financiera ante la volatilidad
De acuerdo con Alejandro Saldaña, economista en jefe de Bx+, las reservas internacionales son una de las principales anclas que refuerzan el grado de inversión del país.
“México cuenta con fundamentos sólidos que ayudan a navegar la incertidumbre global. Entre ellos están la disciplina fiscal, la autonomía del banco central y una sólida posición externa”, explicó.
Gabriela Soni, directora de estrategia de inversión en UBS, coincidió en que estas reservas forman parte de la “red de apoyo” financiera que permite amortiguar episodios de salida de capital, como los que históricamente han detonado crisis en la balanza de pagos.
Por su parte, la gobernadora de Banxico, Victoria Rodríguez Ceja, ha subrayado que este acervo en divisas es una herramienta esencial para respaldar la estabilidad financiera y fortalecer la percepción internacional sobre el país y sus emisores soberanos.
